SEATTLE – Justo cuando parecía que el dominicano Julio Rodríguez estaba a punto de encenderse, el jardinero central de los Marineros fue detenido en seco cuando tuvo que ser removido del juego del sábado en el segundo inning.
Rodríguez experimentó molestias en la parte baja de su cuádriceps derecho durante los entrenamientos previos al encuentro, reveló el manager de los Marineros, Scott Servais. El dolor aumentó en el primer inning, antes de su primer turno al bate del día.
Sin embargo, el club recibió buenas noticias el domingo, luego de que un exámen de resonancia magnética no revelara “nada fuera de lo ordinario” en el cañonero, anunció el Servais antes del último partido de la serie ante los Azulejos. Sin embargo, el dominicano se mantuvo fuera de la alineación del domingo, por precaución.
"Simplemente se tensó, no se sintió bien", explicó Servais sobre el inconveniente de Rodríguez. "Él dijo, 'Voy a intentarlo'. Salió para la primera entrada, y después de la primera mitad del episodio, simplemente dijo: 'No, esto no está bien'".
Cuando se le preguntó si estaría bien en el clubhouse local después del juego, Rodríguez dijo: "Debería estarlo". Pero prefirió no hablar más al respecto.
Rodríguez fue visto moviéndose con cuidado durante la primera entrada del sábado, específicamente cuando se trasladó hacia su derecha ante un línea fuerte que J.P. Crawford logró saltar para atrapar exitosamente y evitar que llegara al césped del jardín derecho.
En medio de lo que ha sido una temporada inconsistente para el dominicano, Rodríguez tuvo posiblemente su mejor partido del año el jueves, conectando un bambinazo de 428 pies (su primero desde el 15 de junio), un doble que salió de su bate a 113 millas por hora (el más fuerte de la temporada para él) y robándose la tercera base deslizándose de cabeza.
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